Noticias

Los desafíos de la evaluación formativa

Viernes 27 de Marzo de 2020

 

El estudio y las tareas desde la casa que han realizado nuestros alumnos durante estas dos últimas semanas, nos han enfrentado a un escenario inédito que nos ha desafiado como docentes y que nos ha abierto a nuevas interrogantes respecto de cómo avanzar en el proceso de aprendizaje.

Para responder hemos tenido siempre un marco de acción que se funda en los intransables de Belén Educa: todos los niños pueden aprender.

Esto implica cautelar que existan las condiciones para que ningún estudiante se quede atrás. Que haya un criterio de justicia en la entrega de educación de calidad.

Sin embargo llevar a la práctica este criterio rector, tropieza con la profunda brecha tecnológica que enfrentan muchos de nuestros estudiantes y que les impide acceder a todo el material que se genera.

Hay colegios de la red, bien sabemos, que han podido superar esta carencia. Para otros, sin embargo, es una limitante difícil de suplir. 

En este contexto, y alineados con lo que el MINEDUC recién dictaminó este viernes, es que como Fundación promovemos que durante este período de trabajo remoto, las evaluaciones de los aprendizajes sean siempre de carácter formativo. Es decir que los trabajos se cumplan aún sabiendo que no tendrán una calificación que influya en la promoción escolar o en el promedio de notas.

Esta evaluación formativa impone además dos desafíos: generar un cambio de mirada para demostrarle a los apoderados y estudiantes que aún sin nota se está aprendiendo igual y por otra parte desafiarnos a producir actividades que sean motivantes.

El material debe evidenciar el estándar y la brecha. Es decir debe mostrar claramente qué es lo que yo espero que logre, cuál es la dificultad y la meta.

El que no haya una nota, se transforma en una buena oportunidad para trabajar la autoevaluación. Se puede lograr que el estudiante visualice un crecimiento en relación a sí mismo, respecto a las actividades que se les envían. 

Junto con ello constituye un desafío que el estudiante forme comunidades de aprendizaje y aprenda a trabajar colaborativamente. 

Tomemos este periodo como el espacio para desarrollar otro tipo de habilidades que no siempre tienen prioridad en la sala de clases: poder encontrar por ellos mismos la manera de hacer las cosas.

 

Francisca Camus

Directora de Gestión Pedagógica e Innovación 





Información de contacto

Moneda 1958, Santiago
fundacion@beleneduca.cl
22 69 88 867