Los hermanos Pedro y Amaro Ferreira son estudiantes del colegio Arzobispo Crescente Errázuriz y ambos pasaron a Sexto Básico y Tercero Medio, respectivamente. Y si bien tienen diferentes edades, hay algo que los une además de su apellido: su amor por la música.
Ellos fueron parte del Primer Concierto de Orquestas Infantiles y Juveniles que Fundación Belén Educa ofreció en el Teatro Municipal de La Pintana, hasta donde llegaron padres, madres, apoderados, profesores y autoridades académicas para disfrutar del talento de los 130 niños y jóvenes de los de los colegios Oviedo, Fresno, Caro, Crescente, Vicuña, Undurraga, San Damián de Molokai y Sazié.
Pedro (percusión) y Amaro (flauta traversa) estaban muy y ansiosos por participar en este evento, cuyo repertorio navideño fue preparado conjuntamente con sus profesores. "Esta experiencia ha sido genial porque no solo practicamos con la orquesta del colegio sino con los otros colegios de la fundación. Fue un trabajo muy bonito y en conjunto logramos llegar a estas melodías y sonidos que hoy mostramos al público", comenta Amaro mientras su hermano menor guarda lo espera para retirarse del escenario donde pocos momentos antes habían sido ovacionados.
Una sensación similar fue la de Kathary González (violín). Para la alumna de Octavo Básico del colegio Cardenal José María Caro y concertina de la orquesta, la presentación que ofrecieron en la misma comuna donde estudia es sinónimo de satisfacción "porque practicamos mucho para llegar hasta donde hemos llegado".
Recuerda que si bien "al comienzo fue difícil encajar cada pieza de la orquesta para que todo sonara bien y coordinado, cuando nos escuché en concierto sentí que habíamos logrado el sonido ideal y eso me pone muy orgullosa".
Sin duda esta satisfacción en Kathary y Amaro fue compartida por toda la orquesta y profesores, pero también en el teatro estuvieron presentes muchos padres, madres y apoderados, que muy emocionados presenciaron lo aprendido por sus hijos y el gran talento musical que poseen.
"La verdad quedamos totalmente impresionados. No pensé que los niños y profesores lograran hacer un espectáculo tan maravilloso", dijo Natalia Rodríguez, madre de Martina Calvo (contrabajo) del colegio Cardenal Carlos Oviedo.
En ese sentido, valoró el trabajo realizado por los profesores para fomentar la música en los estudiantes, lo cual también los ayuda a fortalecer otro tipo de habilidades. "Gracias a la orquesta nuestros niños aprenden algo novedoso y les sirve para ocupar su tiempo en algo bueno, aprenden a conocer, ser más sociables y a desarrollarse como personas y creer en ellos".
Gustavo Méndez, encargado fundacional de Orquestas, precisó que el éxito de este primer encuentro es consecuencia de "un gran trabajo de coordinación entre los alumnos y la red que han formado los colegios para construir esta gran orquesta Belén y que hoy presentó su primer hito musical", destacando la motivación de los jóvenes en cada ensayo y el trabajo de los profesores que los han acompañado en el proceso.