Su objetivo es impulsar la vida comunitaria y sacramental, la oración y el servicio como medios privilegiados para que los miembros de la comunidad educativa puedan reconocerse a sí mismos como hijos de Dios, seguidores de Jesucristo y constructores del Reino de Dios.

En este desafío se insertan las diversas pastorales específicas dedicadas a los alumnos, padres y apoderados, y a los docentes y asistentes de la educación. Todos ellos vivencian experiencias comunes tales como la Oración de la Mañana, la celebración de los sacramentos y las diversas posibilidades de retiros y acompañamiento espiritual.

En Belén Educa se busca que cada uno de los espacios pastorales sean verdaderos “Belén” donde sea posible encontrarse en la sencillez y la humanidad con el rostro cercano y acogedor de Jesús. Se quiere generar permanentemente las condiciones para que todo integrante de la gran familia Belén pueda encontrarse con el Señor.

En ese mismo contexto el área Pastoral pretende ampliar la mirada no solo geográfica o profesional de los alumnos, padres, apoderados, docentes y asistentes de la educación, sino mirar más allá, descubriendo la dimensión trascendente de sí mismo y en ella descubrir la presencia del Dios salvador que ha deseado hacerse nuestro compañero de camino.

La Pastoral abrir a los miembros de la comunidad al misterio de ser hijos e hijas amados por Dios, y conforme a la dignidad buscar el bien de quienes nos rodean construyendo el Reino desarrollando habilidades y dones puestos al servicio de quienes lo necesiten.

La clase de Religión es una asignatura que propicia el Encuentro con Cristo a través de la razonabilidad de su propuesta de humanidad. Por ello incluye al creyente y no al creyente, porque mostrando el mensaje de Jesús en identidad y relevancia, es una clase que se abre al diálogo y a la reflexión. En ella las preguntas tanto más que las respuestas son el medio privilegiado de enseñanza-aprendizaje.

En la clase de Religión se busca que los estudiantes aprendan a reflexionar sobre las grandes interrogantes existenciales y a permanecer abiertos al misterio de lo humano. Se quiere aportar al despliegue de la capacidad espiritual del ser humano y a desarrollar habilidades como la escucha atenta, el discernimiento, la vida interior, la disponibilidad al servicio de los demás, el disfrute de la belleza, la valoración de lo bueno, lo verdadero, etc.

En las clases de Religión de Belén Educa, la atención está puesta en destacar el valor de lo humano, la historia personal y la identidad relacional. Por eso en cada clase se trata de partir por la experiencia humana y poco a poco desencadenar en la experiencia de Dios. La clase de Religión no se agota en dar a conocer el mensaje cristiano. Es una asignatura que puede aportar al trabajo interdisciplinar, desarrollando habilidades transversales al curriculum educativo. Situándose como posibilidad de encuentro dialogal entre diferentes materias. Así, la centralidad de la Escritura como fuente de reflexión y transmisión de la fe, necesita desarrollar la habilidad lectora, la comprensión y la interpretación, lo cual aporta a los objetivos de la clase de lenguaje.

Aporta al desarrollo de valores humanos enraizados en una cultura latinoamericana permeada por el cristianismo, como la solidaridad, la valoración de lo comunitario, el compromiso por construir una sociedad más justa. Estos valores no son vistos como meras utopías sino en el esfuerzo esperanzador de que podemos vivir más humanamente mientras más relevante sea Dios en nuestra vida.

Tiene como objetivo la formación de actitudes que permitan construir una convivencia sana y armónica. Ello deberá plasmarse tanto en la sala de clases, específicamente en la hora de Consejo de Curso, así como en el entorno escolar y social de los alumnos.

Los educadores de Belén Educa sueñan con líderes cristianos: alumnos respetuosos, solidarios, preocupados del bien común, atentos, cuidadosos de las necesidades del otro y con un gran espíritu de servicio.
Este liderazgo se busca desarrollar en los miembros de las directivas de curso y de los Centros de Alumnos, de modo que estas buenas actitudes se aniden y se multipliquen en todas las personas del colegio.

El programa cuenta con una planificación por unidades, con estrategias concretas que se integran a la vida cotidiana del curso y del colegio. De esta manera, el objetivo de formar personas que desarrollen buenas relaciones humanas y solidarias se expresa como modo de vida al ser vivenciado en forma sistemática en la hora de Consejo de Curso. Este programa se realiza de Quinto a Octavo Básico en todos los colegios de la Fundación.

Las unidades de trabajo del programa de Liderazgo Crisitiano son distintas para cada nivel, pues el objetivo de formar líderes cristianos va teniendo una progresión año a año.

Por otro lado, se han definido distintos focos de atención para cada nivel, de manera que tanto el profesor jefe como los alumnos sepan que tienen una meta de convivencia que guiará sus esfuerzos ese año.

El área desarrolla y fortalece en los estudiantes competencias que favorezcan su bienestar psicosocial, a través del acompañamiento al profesor jefe, el trabajo conjunto con el equipo directivo, teniendo como principal aliado a la familia.

El área de Orientación y Familia cuenta con los programas de Orientación, Reuniones de Apoderados y Consejo de Curso.