La red de Convivencia Escolar funciona como un espacio de trabajo colaborativo y horizontal, en donde se mantiene la comunicación y articulación entre los coordinadores de los colegios y el equipo de Casa Central, cuenta Constanza Álvarez, encargada de Convivencia de Belén Educa.

Para mantener la comunicación y articulación de la red, se utilizan distintos mecanismos como reuniones mensuales, WhatsApp común, cadena de mails y Drive grupal al que se suben distintos materiales, todos estos recursos orientados a mantener una comunicación efectiva y constante.

"Esto quiere decir que la red sabe que el equipo está disponible para sus consultas y sus sugerencias cuando ellos lo soliciten, tienen una respuesta pronta y certera para sus inquietudes", señaló Constanza aludiendo al trabajo que realizan ella, Daniela Rivera, jefa del área y Pablo Muñoz, abogado fundacional.

A lo anterior, se suman reuniones o capacitaciones para desarrollar y potenciar distintos temas propios del área. Entre otros, la gestión de la Convivencia para aportar a la definición y perfeccionamiento del perfil profesional de los equipos. Pero la clave de la efectividad de todos estos esfuerzos radica en la articulación del trabajo que permite que toda iniciativa o proyecto, surgido ya sea en Casa Central o desde los colegios, sea conocido, enriquecido y validado por toda la red.

"Es una red que siempre sabe antes de que sucedan las cosas lo que estamos planificando, qué estamos pensando o cómo lo pensamos y, en ella, existe total libertad para que todos podamos emitir comentarios u opiniones", explicó Constanza. Todos estos esfuerzos, están orientados a generar un lenguaje y bases comunes para el trabajo de la red, en el sentido de conocer y dominar los términos, protocolos y los procedimientos del área. Es decir, dominar los fundamentos teóricos para luego transmitirlos al equipo completo de Convivencia Escolar en cada colegio.

En este esquema, el coordinador actúa como un vector de información hacia sus equipos, de esta manera, la red de Convivencia Escolar opera como un espacio de contención, acompañamiento y de aprendizaje común para, y entre, los coordinadores de Convivencia. Con este propósito se desarrollan no solo las actividades de capacitación ya señaladas, sino que esta red se convierte en un lugar para compartir y nutrirse de conocimientos y prácticas desde una mirada formativa. Para ello, cada coordinador tiene la posibilidad de plantear el trabajo que están desarrollando, explicar cómo lo realizan y recibir la retroalimentación de la red para perfeccionar la propuesta, al mismo tiempo que con ella enriquece el conocimiento y las prácticas de los otros miembros de la red.

"El principal motor de nuestra red es la confianza que se ha desarrollado desde su creación para que los coordinadores puedan expresar sus inquietudes, recibiendo apoyo de todos los coordinadores", explicó Constanza.

Procedimientos para asegurar un trabajo fecundo

La metodología y procedimientos para trabajar los proyectos en la red va a depender del lugar desde donde provienen o surgen, detalló Constanza. 

• Si los proyectos nacen desde un colegio, el coordinador es el encargado de presentarlos al equipo de Casa Central, con el fin de proveerlos de un asesoramiento o retroalimentar una planificación acordada para su posterior implementación. En el caso que un proyecto tenga lineamientos comunes que puedan ser compartidos con el resto de los colegios de la red, se utilizan los mecanismos de comunicación de Casa Central para socializar esta experiencia o esta práctica.

• Si los proyectos surgen de Casa Central, el primer paso es establecer sus lineamientos teóricos, sigue luego la implementación y la intervención que determina los pasos a seguir. Una vez construida esta base en común se presenta el proyecto a la red de Convivencia, donde se recibe el feedback; comentarios, adecuaciones y factibilidad del proyecto. Con estos aportes, se modifica la planificación inicial para conseguir un producto final. Este, es compartido con la red, la que a su vez socializa con sus colegios para una posterior implementación.

"Ningún proyecto se llega a entregar a la red sin pasar por este proceso de feedback o retroalimentación, siempre son proyectos trabajados en conjunto", explicó Constanza.

Trabajo conjunto que respeta identidades

Una vez planificado el proyecto o intervención que será aplicado en los colegios, entran a un proceso de diagnóstico y retroalimentación realizado por los mismos coordinadores. De esta manera, ya sea desde Casa Central o desde otra instancia de la red de la que emana este proyecto, toman las observaciones y se hacen cargo de las adecuaciones necesarias. Sin embargo, incluso al momento de recibir el documento final, este entrega orientaciones, y son los coordinadores quienes determinan si requiere adaptaciones, dependiendo de las características de su colegio.

Esta visión es enfatizada por Constanza, quien explica que en la red son conscientes de que "todos los colegios tienen particularidades súper definidas y todos los proyectos debiesen adecuarse a ellas, entonces lo que la red hace es levantar proyectos con bases teóricas y de implementación comunes, pero son los mismos colegios, los mismos equipos de Convivencia Escolar quienes hacen las adecuaciones al contexto particular de cada colegio".

Desafíos que inspiran el trabajo de la red

Constanza distinguió claramente los desafíos que enfrenta la red, los que son retos y aliciente para el logro de sus metas:

• Construcción de la red desde un sentido de comunidad. Esto es, que sus integrantes desarrollen un sentido de identidad con el área y de fraternidad entre sus miembros, “donde nos reconocemos como profesionales del equipo de Convivencia Escolar, que tenemos un mismo propósito, tenemos un sentido de trabajo común, con un alto sentimiento de orgullo”.

• Construcción de un lenguaje común basado en la normativa educacional y la política de nacional de Convivencia. Este lineamiento básico del área es   clave para conseguir una visión definida y compartida que le permita posicionarse frente a otras áreas, ya sea de los colegios o de Casa Central. Este desafío ha requerido de una gran capacidad humana y profesional en términos de constancia, habilidades de comunicación y de elaboración de material que facilite a los coordinadores, por un lado, conocer estas bases comunes y, por otro, lograr la rigurosidad necesaria en su uso. “Como área estamos muy pendientes de que todos tengamos este lenguaje y, no solo lo apliquemos, sino que lo cuidemos y lo hagamos propio”.

• Posicionamiento del área de Convivencia Escolar en los colegios y otras áreas de la Fundación. En este sentido, han enfrentado el desafío de tener que recorrer un camino para llegar a la consolidación de Convivencia Escolar sin contar con un referente previo. Por ello, alcanzar este posicionamiento y lograr el desarrollo de los proyectos que han visualizado como red, se ha constituido en un desafío primordial, propio y permanente, y en un aliciente para el trabajo fecundo y fortalecimiento del área. “Ahora los coordinadores sienten que ya tienen un espacio, se han empoderado. Para esto fue clave la creación de la figura del coordinador de Convivencia Escolar y su incorporación al equipo directivo”, valora.

Los principales avances del área

A nivel de los colegios, uno de los principales progresos ha sido el orden. Esto se evidencia, por ejemplo, en los planes de gestión de la Convivencia de los colegios año 2020, que han mostrado un notorio avance respecto a los del año anterior, especialmente en materias como la inclusión, la disciplina formativa, la prevención y la promoción de la Convivencia Escolar.

En concreto, los colegios han integrado tareas y han utilizado sus redes sociales para compartir actividades y acciones dirigidas a la sana interacción, a promover un clima de buen trato, a promover que los estudiantes avancen en el reconocimiento de sus emociones, la expresión de esta y en la formación integral.

A esto se suma el desarrollo de los equipos; se han fortalecido, empoderado, tienen claros objetivos y lineamientos y se han ido profesionalizando.

Desafío pendiente

Un desafío del área es que si bien los encargados y coordinadores de Convivencia trabajan muy conectados con los docentes, esta relación aún depende de cómo se haya establecido en cada colegio.

En general los docentes recurren a los equipos de Convivencia cuando se presenta alguna dificultad, pero el desafío del área radica justamente en volcarse hacia un trabajo más preventivo, de formación de los docentes en temas de prevención y promoción de la Convivencia, para anticiparse a ciertas situaciones. 

Hoy día el trabajo está interrelacionado, y el equipo de Convivencia está a disposición para, por ejemplo, apoyar al docente en la creación del vínculo y contacto con los estudiantes. Si alguna vía de comunicación e información docente- estudiante falla, Convivencia puede reaccionar a través de otro tipo de mecanismos y protocolos e, incluso, activar redes internas para verificar la situación del alumno.

En esta línea, un gran desafío para el área es que el equipo de Convivencia también pueda proponer, promover o construir con los docentes estrategias donde se trabaje un clima de convivencia nutritivo tanto al interior de las aulas presenciales, como, hoy, en las digitales.

Tres testimonios del trabajo en red del área

La mejor manera de conocer el trabajo de esta nueva red, es a través de sus protagonistas. Coordinadores de Convivencia Escolar de distintos establecimientos, nos contaron la importancia de la red y cómo organizan su trabajo.

“Cuando asumí como encargada de Convivencia no existía la red y teníamos muchas dudas y cometíamos muchos errores también, entonces para mí es fundamental y creo que funciona de manera óptima. Cuando tenemos dificultades o si necesitamos apoyo, el equipo de Casa Central siempre está ahí”.

Catalina Lillo

Coordinadora Convivencia Escolar colegio Oviedo

“Es fundamental el apoyo de la red y la retroalimentación generada. Es un pilar que posibilita el buen funcionamiento como equipo. Fomenta la homogeneidad de las acciones y focos, siempre resguardando la particularidad de cada colegio.

El trabajo colaborativo de la red nos permite manejar un lenguaje común, articulado y compartir buenas prácticas, experiencias positivas y, por supuesto, aquello que resulte ser un nudo en la práctica cotidiana… es un soporte técnico constante en temas normativos”

 José Ignacio Riquelme

Coordinador Convivencia Escolar colegio Caro

“Uno de los ejemplos más gráficos en nuestra área es cuando nos llega una denuncia de la Superintendencia. Por lo general tenemos un plazo muy corto, no son más de tres días hábiles. Normalmente las denuncias llegan los días viernes, después de las 17.00 horas, entonces uno pasa el fin de semana muy preocupado, se lleva un poco los antecedentes porque lo que hay que enviar a la Superintendencia es un detalle y todas las evidencias del trabajo que se ha hecho con ese alumno, con plazos de meses hacia atrás y todo los documentos tienen que estar acorde a lo que estipula nuestro reglamento, entonces esa preparación que nosotros tenemos que hacer y como profesores, esa asesoría legal, es la que nosotros recibimos inmediatamente, en tiempo real por parte de la red”.

 Elga Huerta

Coordinadora Convivencia Escolar y Formación colegio Silva