Respetando las disposiciones sanitarias establecidas por los ministerios de Salud y Educación, los colegios de Belén Educa se han preparado durante las últimas semanas para reabrir sus puertas y recibir de manera gradual, segura y voluntaria, a colaboradores y estudiantes de IV y III medio, de acuerdo a las fechas y condiciones que establezca cada colegio.

El colegio Oviedo abrirá sus puertas el lunes a los estudiantes de IV medio que están prontos a terminar su etapa escolar y a enfrentarse a la PDT. El día martes se sumarán los del colegio Sazié y el miércoles, los de San Damián.  

Luego se irán sumando los demás colegios, información que irá bajando cada uno de ellos a su comunidad en estas dos semanas. 

La comisión Administrativa-sanitaria, que ha liderado Roger Marull, ha elaborado protocolos para asegurar la salud de toda la comunidad de los colegios de Belén Educa.

Giannina Saavedra, prevencionista de riesgos y Christian Herrera, jefe de Infraestructura, detallan las medidas, acciones que se han realizado para entrega certeza y tranquilidad en la reapertura.

• La preparación de los colegios

Giannina y Christian confirman que este trabajo ha sido de largo aliento y para él han recogido experiencia de países que han retornado a las clases presenciales para, desde ahí, tomar los elementos centrales y adaptar esta información a la realidad de nuestro país y colegios. “Conformamos una Comisión de Retorno que involucra diferentes áreas y profesionales dentro de la Fundación y estamos trabajando en todo el proceso de acompañamiento de cada equipo directivo y sensibilizando a los diferentes equipos sobre la importancia de poder volver para nuestros alumnos, aunque quede tan poquito del año”, afirmó Giannina.

“De esta manera, se han tomado las mejores decisiones en cuanto a medidas de seguridad, con la finalidad que todos los colaboradores y estudiantes cuenten con la protección, seguridad y distanciamiento físico necesarios para el autocuidado, para esto, se han demarcado todos los espacios comunes y se han dispuesto afiches informativos de autoprotección en cada uno de los colegios”, explicó Christian, quien añadió que, en lo posible, se ha tratado de no dejar pasar detalles.

Giannina agrega que en este proceso de instalación de una cultura de autocuidado y cuidado mutuo, nadie es más importante que otro y que depende de toda la comunidad prevenir los contagios en esta modalidad de trabajo presencial.

• Protocolos, medidas sanitarias y su socialización

Durante la pandemia los colegios han mantenido turnos éticos para la entrega de material pedagógico y canastas Junaeb, por lo que desde su inicio se han compartido los protocolos y se ha capacitado a auxiliares y jefes administrativos. Desde hace semanas, se está entregando información y organizando el retorno presencial con los equipos directivos, docentes y asistentes de la educación. “En estas reuniones se han abordado varias dudas referidas al manejo del virus que eran necesarias resolver”, explicó la prevencionista de riesgos. El foco está puesto en el cuidado de toda la comunidad educativa de los colegios, explicó Herrera, ya que lo que se busca es “priorizar que toda persona que integra nuestra comunidad Belén cuente con las medidas de protección y autocuidado necesarios para que puedan cumplir su rol de la mejor forma posible y con los resguardos que se merecen”, enfatizó.

Entre estas medidas, todos quienes nos presentemos en colegios, Casa de Retiro y Casa Central, debemos:

1. Utilizar mascarilla permanentemente y de manera correcta.
2. Mantener el distanciamiento físico de a lo menos un metro.
3. Lavar las manos con agua y jabón o higienizarlas con alcohol gel de manera frecuente. Para ello, se han dispuesto distintos puntos con dispensadores y en los baños se mantiene jabón y toallas de papel secante a disposición de colaboradores y estudiantes.
4. Limpiar varias veces durante la jornada las superficies más utilizadas.
5. No asistir al colegio si es que se ha estado en contacto con alguien infectado.

A estas medidas se han sumado: controles de acceso a cada una de las instalaciones, donde se mide la temperatura y se higieniza el calzado y las manos de cada persona antes de ingresar.  Además, se han habilitado puertas de acceso y de salida únicas, correctamente delimitadas, marcando el piso con diferentes colores que lo distinguen. También se aumentaron las rutinas de aseo de zonas críticas, utilizando limpiadores en base a amonio cuaternario de amplio espectro; se estableció un tiempo máximo de uso de salas, oficinas y otras instalaciones, el que es seguido por un periodo de ventilación. Otro punto fundamental es el respeto de aforos de estos recintos, para lo que se han señalizado los espacios inhabilitados dentro de ellos. Finalmente, se han dispuesto mascarillas de 3 pliegues y guantes para todos los colaboradores y, para auxiliares, se agregan pecheras desechables y guantes de látex como elementos protectores.

Giannina Saavedra y Christian Herrera detallaron que en todo este proceso se ha hecho evidente la importancia de la comunicación, que permite escuchar inquietudes y traspasar la información de manera oportuna y clara entre y desde los equipos escolares hacia apoderados y estudiantes.

“Hemos entendido que una comunidad preparada, no sólo en términos de protocolos, sino en hacer de la cultura preventiva su principal arma frente al virus, es la puerta de acceso a la planificación de todas las actividades que se quieran realizar en este término de año. Sin el apoyo integral de todos nuestros colaboradores, este retorno no sería posible”, concluyó Giannina, punto compartido por Christian quien comentó que “si sumamos a todo lo anterior los resguardos que hemos tomado como institución y, sobre todo, el autocuidado de cada integrante de la comunidad, las probabilidades de contagio son mínimas”.