Querida comunidad,

 Este año, sin duda que ha sido difícil. Nada hacía presagiar esta enorme catástrofe que nos afectaría tan duramente.

 Sin embargo, ante la adversidad aflora el sello que en nuestra comunidad se lleva en el corazón.

 El sello del valor de la solidaridad manifestada en todas sus expresiones.

 De la noche a la mañana nos unimos todos y fuimos capaces de mirar al prójimo y aportar a construir puentes donde no existían.

 Nuestras familias han sido acompañadas con apoyo no solo académico, sino que también en el ámbito social, psicoemocional y en el desarrollo de la fe, unidos en oración.

 Acá nos damos cuenta que la solidaridad no venía sola, viene de la mano de un sentimiento de gratitud.

 Es por ello, que hoy nos sumamos con esta gratitud, en un afectuoso saludo de reconocimiento hacia ustedes: funcionarios, auxiliares asistentes, profesores y equipos directivos.

 Los que han estado en primera línea, instando, reinventándose por todos los medios para que nuestros hijos se conecten y eduquen. Adaptándose en su estructura y sus métodos de enseñanza para llegar con educación de calidad a cada una y uno de nuestros hijos.

 A través de estas sentidas palabras destacamos cómo sus profesores, profesoras, asistentes y educadoras grandes maestros y maestras, cultivan una relación humana más viva y perdurable que aquella que se establece entre el maestro y el alumno, allí se crea un poderoso puente de comunicación, una reflexión de largo aliento, una complicidad que cultiva el crecimiento del  espíritu.

 ¡Cuánto nos extrañamos, en este año diferente!, pero pese al distanciamiento físico, hemos estado emocionalmente más cerca que nunca.

 ¡Infinitas gracias!

Juntos somos comunidad.

Juntos somos Belén.

Juntos podemos lograrlo.

 

Afectuosamente,

Directiva CGPA

Colegio San Damián de Molokai.