Niñas y niños de las comunidades educativas de los colegios San Damián, Caro, Hurtado, Fresno y Vicuña concurrieron hasta el Parque Araucano, para asistir a KidZania, como un reconocimiento a su compromiso, el de sus familias y docentes como parte de la campaña “Cuando asisto, aprendo”. 

Estas visitas corresponden a las primeras realizadas en este semestre y en el segundo, más colegios podrán otorgar esta experiencia a sus estudiantes.

Durante la actividad de bienvenida, Carmen Cisternas, directora de Relaciones Institucionales y Vinculación con el Medio, en representación de Fundación Belén Educa valoró la alianza con Santander Chile y Kidzania, quienes se suman a la causa de motivar y reconocer a que las niñas y niños asistan a clases y pueden vivir experiencias significativas en las que aprenden jugando. 

Por su parte, Catalina Bustos, analista de Banca Responsable y Sostenibilidad de Santander manifestó que, “para nosotros la educación es progreso, y en estos 20 años -trabajando -, con la Fundación Belén Educa hemos podido reforzar estos valores y principios, apoyando a las y los niños del país”, dijo la ejecutiva.

KidZnia es una ciudad construida a escala, en 7 mil metros cuadrados, en donde las y los estudiantes pueden explorar y conocer más de 80 profesiones y oficios lo que permite acercarlos a la vocación a través del juego, combinando la diversión y el aprendizaje mediante juegos de rol.

Jessica Solar, profesora del colegio Vicuña, quien por segundo año es profesora jefe de un curso con destacada asistencia mencionó que las visitas de Kidzania son coherentes con la campaña, porque a las y los estudiantes se les motiva a que asistan para que aprendan y puedan cumplir sus sueños, y al vivir estas experiencias les acerca a diversas profesiones y a que se imaginen que lo que quieren lograr.  

En una de las tiendas, Massiel Soto, estudiante de 4° básico A del colegio Bicentenario San Alberto Hurtado, jugó a preparar chocolate y comentó, “fue muy divertido, me encanta cocinar, en mi casa lo hago y me gustaría estudiar gastronomía”.

En el taller mecánico, Mateo Fernández de 2° básico C del colegio Cardenal José María Caro, ayudó a componer un “desperfecto” en el motor de un auto y le echó aire a una rueda desinflada. El automóvil quedó 100% operativo gracias a la colaboración de Mateo para circular por las calles de la mini ciudad.

Las y los niños del colegio Bicentenario San Damián de Molokai optaron por ingresar a los estudios de la radio FM2, allí “sacaron al aire”, un entretenido programa conducido por ellas y ellos mismos.

En la ocasión las y los estudiantes ingresaron, entre otros espacios, a un pabellón de cirugía, a una sala de odontología, concurrieron a apagar el incendio de un hotel, junto al cuerpo de bomberos, aprendieron a reciclar plástico, reportearon para un diario y un canal de televisión. Todas experiencias significativas en donde niñas y niños; explorando y creando, son protagonistas de su aprendizaje como cuando asisten a la sala de clases.