Los estudiantes de los colegios Belén Educa revisaron sus puntajes PSU el 28 de diciembre con esa mezcla de ansiedad y nervios que caracteriza a cualquier joven que está a punto de dar una gran noticia. Como era de esperar, fruto del estudio, hubo al menos 17 de ellos que tuvieron destacados resultados y podrán acceer a la educación superior incluso optando a beneficios.
En el colegio Cardenal Raúl Silva Henríquez de Puente Alto fue donde más celebraron, pues siete estudiantes obtuvieron puntajes sobre 700. Cristóbal Cuevas fue uno de los más altos: sacó 735 puntos en Ciencias, 737 en Matemáticas, 681 en Lenguaje y, como si fuera poco, ponderó 740 por su promedio de notas NEM. Junto a su madre y su abuelo revisó los resultados. "Yo no quedé tan conforme, pensé que iba a sacar más. Pero mi mamá y mi abuelo estaban muy felices", contó el alumno, que se preparó estudiando en el Preuniversitario Pedro de Valdivia gracias a una beca Belén Educa y además "poniendo atención en clases", dijo.
Por estos días, espera los resultados de su postulación a la Universidad de Chile. "Quiero estudiar geología. Me gustaría ir a trabajar a las minas al norte", detalló.
Javiera Bravo (foto portada), egresada del Colegio Lorenzo Sazié, fue una de las que brilló en la PSU. En la prueba de Historia consiguió 701 puntos. Cuenta que su técnica fue mucho estudio: "Hice un preu y estudié por mi cuenta. Usaba hasta los ratos libres en el colegio para estudiar". Su puntaje le alcanzó para postular a la carrera que deseaba. "Quiero estudiar filosofía en la Universidad de Chile", contó la joven, que será la segunda persona de su familia en ingresar a la universidad, pues su hermana se encuentra estudiando enfermería.
Del colegio Cardenal Juan Francisco Fresno, Virginia Zelada (foto interior) tuvo un rendimiento destacado en la prueba de Lenguaje, con 729 puntos. Ella también obtuvo una beca para prepararse en el Preuniversitario Pedro de Valdivia. "Cuando di la prueba, igual estaba nerviosa, pero sabía que en Lenguaje me iría bien, porque respondí muy segura casi todas las preguntas", comentó. "Cuando vi mi puntaje fue como ¡wow!, no lo creía. Le conté a mi familia y estaban felices con mi puntaje. Me superé harto de los ensayos que hacía", sumó orgullosa.
El anhelo de la alumna era entrar a medicina en la Universidad de Chile, pero le faltó puntaje. Aún así, la estudiante no se rinde. "No me alcanzó , pero postulé a bachillerato en la Universidad de Chile, para así convalidar y poder ingresar a medicina. Siempre he querido estudiar eso, incluso hace unos años se lo comenté a don Juan Enrique Guarachi, el director ejecutivo de la Fundación, cuando fue a visitar el colegio. Es mi sueño", contó optimista.