El sociólogo, doctor en Filosofía y fundador de Newfield Consulting, Rafael Echeverría, expuso en el segundo encuentro de redes que entre sus misiones principales tienen la entrega de educación de calidad en sectores vulnerables. Las instituciones invitadas fueron Fundación Belén Educa, Enseña Chile, SIP, Aptus, Astoreca, Aprender y la Corporación de Educación del Arzobispado de Santiago. Al encuentro asistieron 69 líderes educativos, que siguieron durante toda una jornada la exposición de Echeverría, llamada “Hacia una mirada ontológica del quehacer educativo”.

Luego de un tránsito necesario por la fenomenología y la hermenéutica, Echeverría centró sus explicaciones y ejemplos en la teoría que propone al lenguaje como competencia transformadora, a través del método OSAR (Observador, Sistema, Acción, Resultados) como propuesta. Luego vinculó su teoría con el mundo educativo. “El aprendizaje valida la enseñanza, y es el aprendizaje lo que valida al maestro. No son maestros las personas que tienen un cartón universitario, sino que aquellos que logran aprendizajes, son aquellos que producen saltos en los alumnos”, dijo.

Planteó también que la docencia ya no es la de antes y que el liderazgo es otro vehículo para que los aprendizajes sean exitosos y se logre la transformación del entorno. Por eso la relevancia de la sala de clases como espacio de diálogo. ”La práctica docente es en sí misma una práctica conversacional. El aula debe ser un espacio de interlocución. Un maestro debe escuchar a sus alumnos: saber qué buscan, qué aspiran, con qué sueñan. El maestro debe acrecentar esos espacios conversacionales”, dijo tras su ponencia.

“La palabra es acción y tiene el poder de transformación. Escuchar al otro significa la posibilidad de ser transformado por el otro. Eso se llama aprendizaje”, explicó sobre la ontología del lenguaje. También dijo que “la pedagogía del pasado ya no sirve. Todo esto lleva a pensar que debemos modificar la figura del maestro. Necesitamos profesores coaches que estén atentos a sus alumnos. Necesitamos profesores líderes”.

Tomando en cuenta el contexto actual de la educación chilena, el sociólogo invitó a la red de instituciones a ser referente en período de grandes reformas. “Ustedes pueden convertirse en un referente importante en función de resultados que el sistema global no va a alcanzar. Hay un nivel de compromiso, de rigurosidad y de seriedad en lo que hacen que son fundamentales en la manera de cómo enseñamos y de cómo cambiamos el método de enseñanza”, comentó.

El mensaje final que dejó Echeverría fue fortalecer el trabajo conjunto: “No se debe comenzar desde el ángulo de convencer al otro desde sus propios puntos de vista, sino más bien de abrirse a lo que el otro puede aportar para hacer las cosas mejor. En la medida que se establezcan prácticas de escucha efectiva, las potencialidades son infinitas. Aprender a escucharnos desde la dignidad, el respeto y la tolerancia, es la clave para el trabajo en red”.