En menos de una hora y media, 20 estudiantes de III y IV medio del colegio Juan Luis Undurraga lograron lo que hace 25 años hubiese demorado décadas en realizarse. Los jóvenes son de la especialidad de Telecomunicaciones y gracias a un proyecto que financió Google Chile y que ejecuta la ONG Innovacien, en pocos minutos y con las simples instrucciones del profesor David Leal Olivares, consiguieron convertir en sonido todo lo que escriben en su celular. Lo hicieron construyendo su propia aplicación para Android.
El proyecto se llama “Programadores escolares” y contempla en total seis jornadas de clases de programación, cada una de tres horas. La idea es disminuir la brecha digital y favorecer proyectos que fomenten la creatividad y el emprendimiento. En el caso específico de Quilicura, Innovacien está trabajando desde junio pasado con 80 niños de distintos establecimientos y las aplicaciones tienen que servir como aporte para solucionar un problema de la comuna. Un estudiante de otro colegio, por ejemplo, inventó una aplicación que hace sonar una alarma en el celular por si uno se queda dormido en la micro de vuelta, cuando está a 300 metros de su casa. Víctor Garay, alumno del Undurraga, participó con David Leal en un taller de invierno y creó un botón de pánico. “Al abrir la aplicación te manda un mensaje a las redes sociales, incluyendo Facebook, WhatsApp y Twitter. Dice: ‘Auxilio, me están asaltando en tal coordenada’. Es una aplicación rápida y solo me queda corregir algunos detalles”, contó. “Queremos generar comunidades autónomas”, agregó el docente.
David Leal quedó sorprendido con el nivel de conocimientos y el rápido avance que tuvo en la primera clase. Pudieron hacer tres ejercicios y uno de ellos era aprender a copiar y mejorar una aplicación. “Los dejo equivocarse y ellos mismos van aprendiendo de sus errores”, comentó en el recreo, cuando ya la mitad del curse tenía listo otro ejercicio: hacer que su celular convirtiera en sonido el texto que iban ingresando. Marckly Beaudouin, del III medio A, consiguió hacerlo de manera perfecta.
La meta es que los escolares programen aplicaciones móviles para sus celulares con el explicó Víctor, que ahora apoya a sus compañeros cuando tienen dudas.
“Los alumnos serán creadores de aplicaciones de App Store. Se les va a enseñar cómo hacer una aplicación y cómo funcionan”, explica Juan José Catalán, jefe de Tecnologías del colegio Juan Luis Undurraga. Los trabajos irán almacenándose en www.programadoresescolares.cl y también serán parte de un concurso.
El programa incluye sesiones con el método Design Thinking, que enseña a programar y emprender, a través del conocimiento de patrones de modelo de negocios para una aplicación. Alejandra Bonati, gerente de Comunicaciones de Google Chile, explicó en la página web de la ONG Innovacien que “es muy satisfactorio para nosotros apoyar este tipo de iniciativas que no sólo acercan la tecnología a niños y jóvenes, sino que también los ayuda a entender y evaluar las necesidades de su comunidad y a trabajar con sus propias ideas y herramientas para darles solución”.
También mencionó el gran peso específico que tiene actualmente la tecnología en la vida de los niños y adolescentes. “Que ellos entiendan este dispositivo más allá del uso que le dan en su vida diaria, y saber que una aplicación puede ayudar, les da una visión de mundo amplia y la noción de que es posible tener un impacto en la vida de la personas a través de algo tan sencillo como una aplicación”, opinó.